El reflejo de la recaudación de impuestos lo ve cualquier ciudadano en la calle. Cada obra de la administración de gobierno tiene un porcentaje de lo que se recibe cada año. Por tanto, todos los ciudadanos mexicanos mayores de edad tienen la obligación de declarar sus ingresos para determinar si deben o no pagar impuestos.
Sucede igual con las personas físicas asalariadas. Aunque es un criterio universal de que quien recibe más paga más, no están exentos los asalariados de cumplir con obligaciones fiscales de las personas físicas. Lo más importante es que estés al día y puedas aprovechar todos los beneficios de cumplirlas.
La inscripción en el RFC, un paso clave
El primer paso para que las personas físicas cumplan con sus obligaciones tributarias es la inscripción en el RFC. Este es el Registro Fiscal de Contribuyentes, y es una clave única que permite que las personas realicen actividades económicas lícitas.
Si estás en condición de trabajador asalariado, es tu empleador quien debe inscribirse ante el SAT. Lo que necesitas hacer es entregar tu acta de nacimiento. Si él te da la autorización, puedes culminar el trámite por ti mismo.
La actualización permanente ante el RFC
Sí, ya estás inscrito en el RFC y tienes tu clave. Ese número te distingue como contribuyente y no cambia con el paso del tiempo. Eso sí, tienes que hacer actualizaciones permanentes que permitan al SAT tu condición actual y eso incide en la calificación que recibirás a la hora de presentar tu declaración.
Las actualizaciones en el RFC son necesarias en caso de:
- Cambio de domicilio, y deberás reflejarlo ante el RFC mediante la página en internet, declarando la nueva dirección.
- Aumento o disminución de obligaciones. Ocurre cuando se cambia de actividad económica o se modifique una obligación, como la presentación de declaraciones.
- Suspensión de actividades, cuando por cualquier motivo ya no estés desempeñando tu actividad económica.
- Reanudación de actividades, que aplica solo en caso de haberlas suspendido previamente.
Las cuatro actualizaciones se pueden presentar de manera remota, a través de la página web del RFC y el SAT.
Esta no es la única obligación fiscal de las personas asalariadas. Todo conduce a la declaración anual de impuestos, que te explicamos a continuación. Sigue leyendo.
La declaración de impuestos
El objetivo principal de las obligaciones fiscales de las personas físicas asalariadas es que hagan una declaración de impuestos. No se debe confundir declaración con pago, en algunas circunstancias tus ingresos y tus deducciones llevarán tu obligación de tributo a cero, o incluso tendrás saldo a favor.
La declaración de impuestos se hace todos los meses de abril. Se debe presentar en los siguientes supuestos:
- Al haber obtenido 400 mil pesos o más en el año
- Cuando hayas prestado servicios a dos patronos durante el mismo año, sin importar si superas los 400 mil pesos en el año
- Al haber presentado a tu patrón una solicitud de que no presente tu declaración anual, sino que la harás tú
- Al dejar de prestar servicios antes del 31 de diciembre del año al que se refiere la declaración
- Si prestaste servicios profesionales a personas que no efectúan retención. En este grupo se incluyen las organizaciones internacionales y representaciones diplomáticas
- Si tienes y obtuviste ingresos adicionales acumulables además del salario. Se incluyen en este aparte los honorarios, actividades empresariales, arrendamiento de propiedades y otros.
- Si recibiste ingresos adicionales por jubilación, liquidación o indemnización laboral.
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¿Quiénes están exentos de presentar declaración de impuestos?
En teoría, todos los ciudadanos deben presentar declaración de impuestos. Esta es la principal de las Obligaciones fiscales de las personas físicas, pero tiene dos excepciones que son:
- Quien obtiene sus ingresos de un solo patrón, sin importar si supera los 400 mil pesos al año. La condición es que se haya emitido CFDI (comprobante fiscal) de nómina por la totalidad de los ingresos. También tiene que no resultar impuesto a cargo en la declaración anual.
- Quien obtiene ingresos por salarios y por intereses nominales que no excedan los 20 mil pesos, de parte de instituciones que componen el sistema financiero.
La importancia de una firma de contadores
Recuerda que contar con una firma de contadores expertos en temas fiscales es vital para presentar una correcta declaración de impuestos. Disfruta de rebajas por pago a tiempo, evita las sanciones y mantente al día, lo que te permitirá acceder a líneas de créditos y estímulos a la producción.
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